La caída de Dina Boluarte no fue un accidente político. Fue la consecuencia directa de un país que perdió el control frente al crimen y la corrupción. Mientras las calles se llenaban de sangre, extorsión y miedo, los políticos jugaban a protegerse entre ellos, debilitando las leyes que deberían haber defendido a los peruanos.
El asesinato de un chofer o el ataque a una banda musical ya no sorprenden a nadie. La delincuencia se volvió parte del paisaje nacional, y...
Mientras el país vive una ola de violencia sin precedentes, con sicarios y extorsionadores libres, la justicia se ensaña con los policías que arriesgan su vida para mantener el orden. El caso del suboficial Luis Magallanes Gavidia, detenido por la muerte del joven Eduardo...