Hemos visto a decenas de rostros políticos llamando al pueblo peruano a un levantamiento revolucionario en Fiestas Patrias.

Senderistas, admiradores del comunismo venezolano, seguidores del lagarto Vizcarra y los feligreses de Castillo, buscan por uno u otro motivo que se incendie el país.

Los vizcarristas quieren incendiarlo para que el Lagarto no vaya preso por corrupto. Los castillistas para recuperar la imagen de un golpista, corrupto y de ideas empobrecedoras. 

Si nos preguntan, nunca hemos defendido al gobierno de Boluarte, pero crear más caos, violencia y destrucción solo perjudica al pueblo.

¿Queremos un cambio de rumbo? Sí. ¿Queremos cambiar totalmente a la clase política que nos Gobierna hace 30 años? Sí. ¿Queremos acabar con la corrupción? Definitivamente.

Pero eso no se logra con violencia, sino con mejores ideas, siendo verdaderos patriotas, pensando en nuestra gente y trabajando para lograr el cambio. No quemando nuestra casa. Por eso a las marchas diles NO.